Casa Propia: ¿Cómo Elegir una Vivienda?
Que felicidad más grande el cumplir el sueño de la casa propia, se trata sin duda a lo que muchos aspiramos llegar. Es la inversión más grande de una familia por lo que hay que pensarlo bien y elegir la vivienda adecuada, además de leer la letra chica en las promesas de compra y créditos hipotecarios.
Antes de siquiera comenzar a buscar, definir el presupuesto es vital. Cuánto tengo, cuánto puedo pagar cuánto debo pedir prestado y cuál será el valor final del crédito; sin olvidar el considerar el costo de la vivienda (gastos comunes, cuentas, etc)
También el espacio es un tema importante, sobre todo para familias jóvenes que posiblemente crezcan en número de miembros. Es fundamental pensar no sólo en el presente, sino que también en los años que vendrán y la factibilidad de una vivienda para ser ampliada.
La distribución puede parecer un tema sin mucha relevancia, pero cada familia quiere ciertos espacios y distribuciones específicas, por ejemplo la cercanía del dormitorio principal al de los niños, existencia de baño de visitas, cantidad de baños, etc. Lo mismo en el caso del espacio para los muebles, visitar las opciones con huincha de medir, considerando la ubicación de los muebles que ya se tienen o los que les gustaría adquirir.
El poder de la ubicación es de conocimiento mundial y puede ser un factor muy determinante al momento de elegir una vivienda. La cercanía con el lugar de trabajo, transporte público, colegios entre otros, puede condicionar la elección. En cada etapa de nuestras vidas hay factores determinantes a la hora de elegir una vivienda. En el caso de parejas jóvenes con planes de familia, una avenida muy transitada probablemente no sea buena opción. Una pareja retirada no querrá vivir en un condominio lleno de niños y menos en un barrio universitario. Toda comunidad ofrece un estilo de vida diferente e importante de considerar antes de elegir una vivienda.
De más está decir que la materialidad es algo que no se puede pasar por alto. Los materiales de construcción del inmueble deben ser sólidos y duraderos. Hay que fijarse en los techos, ventanas, muros y suelos antes de si quiera pensar en comprar una casa o departamento.
Como la vivienda es algo que no se cambia muy a menudo, el espacio de almacenamiento nos debe permitir guardar todo lo que uno imagina y más.
Una vez decididos, tener una inspección profesional es de gran ayuda y evitará problemas de post venta, principalmente tratándose de propiedades usadas. Existen profesionales en el mercado que ofrecen este servicio, no es barato pero nos ahorrará tantos dolores de cabeza que vale la pena. La idea es detectar filtraciones, problemas de instalaciones eléctricas, alcantarillado, tuberías rotas, grietas, puertas hinchadas, etc.
Si la elegida es una vivienda usada, una vez considerados todos los puntos anteriores, es vital cerciorarse de que ésta no tenga problemas legales, cargas o deudas. Que esté inscrita en el Conservador de Bienes Raíces bajo el nombre de quien se señala como propietario (verificar titularidad); que la dirección , calle y número, coincidan con la escritura; que los planos coincidan con la construcción y que las modificaciones estén regularizadas; y las contribuciones estén al día.
En el caso de las construcciones nuevas, organismos como el Sernac velan por la legalidad de los procesos de compra y para que los derechos del comprador se respeten a cabalidad. En su sitio web, esta institución recomienda considerar varios factores entre los cuales cabe destacar los siguientes:
- El consumidor tiene el derecho a que se cumpla todo lo señalado por la publicidad y promesas de compra por parte de la empresa (plazos de entrega y especificaciones de la vivienda, como metros cuadrados, materialidad, etc.) Lo que es anunciado mediante publicidad es considerado parte de un contrato, por lo que el comprador puede exigir cada detalle ofrecido (vigilancia 24 horas, juegos infantiles, quincho, ect.) Es recomendable guardar todo el soporte publicitario para saber exactamente qué exigir como prueba en caso de incumplimiento.
- Todo lo anterior también rige para la compra en blanco (antes de comenzada la construcción) y para la compra en verde (antes de terminada la construcción). En ambos casos existe una normativa que exige una póliza de seguro a la empresa para garantizar al consumidor la devolución de su dinero en caso de que el proyecto no se realice.
- Una de las promesas más incumplidas es la del precio mínimo o “desde”, éste debe ser real y comprobable.
- Existe una multa de hasta 750UTM para las empresas que no cumplan con lo ofrecido y los compradores tienen derecho a indemnización en el caso de sufrir algún daño producto del incumplimiento de una empresa.
- Existe la Ley de Calidad de la Vivienda, regulación especial que establece el derecho a garantía con plazos determinados según los daños que pueda presentar la vivienda nueva. En los casos de problemas que afecten a un conjunto habitacional, es posible realizar demandas colectivas.
- Es fundamental saber exactamente las obligaciones de la empresa constructora, por ejemplo:
- Problemas en las terminaciones durante los tres primeros años
- Problemas en las instalaciones en los cinco primeros años
- Problemas estructurales durante los 10 primeros años desde la compra de la vivienda
- Problemas en las terminaciones durante los tres primeros años
Considerado todo lo anterior, es más fácil y seguro encontrar la vivienda que se convertirá en lo que hemos soñado alguna vez. Suerte en la búsqueda y paciencia para no tomar decisiones precipitadas.
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